Las empresas están tratando de encontrar la manera de alentar y apoyar las zonas informales de manera que funcione para su empresa de acuerdo con su cultura corporativa y para la satisfacción y la productividad de los trabajadores. Las zonas informales suelen ser utilizadas entre 15 y 30 minutos con un máximo de 5 personas. Estos espacios han de ser confortables, coloridos y dotados de las herramientas necesarias como puede ser una excelente conectividad o paneles fonoabsorbentes para evitar la propagación del sonido.
 
Estas zonas informales son necesarias hoy en día ya que más del 50% del trabajo que se realiza es en equipo, lo que exige zonas diferenciadas donde desarrollar proyectos comunes. Estos encuentros no siempre son programados por ese motivo. Algunas compañías optan por salas que varían de forma cambiando sencillos paneles separadores según el número de personas que se reúnan y la tarea que vayan a desempeñar. Este nuevo modelo de oficina está en pleno auge.
 
El carácter informal de estas reuniones vienen de sus características: espontáneas, informales, improvisadas… Las empresas entienden cada vez más que son necesarias estas zonas de trabajo informales, no para tomarse un café, sino para trabajar. La necesidad de los empleados para generar ideas revolucionarias e innovadoras hacen de estas zonas una necesidad imprescindible dentro de una oficina.