El precio medio de una vivienda en Londres, una de las ciudades más caras del mundo, alcanzó las 536.000 libras (casi 700.000 euros, al cambio de hoy) en 2015, según datos difundidos por la Oficina Nacional de Estadísticas británica (ONS). El área metropolitana de Londres experimentó el año pasado un aumento de los precios de la propiedad del 9,4 %, comparado con un crecimiento del 6,7 % en todo el Reino Unido, donde el valor medio de las residencias es de 288.000 libras (unos 370.000 euros).
 
Por regiones, la inflación inmobiliaria creció un 7,3 % en Inglaterra, el territorio más poblado del país, un 1 % en Gales y un 1,5 % en Irlanda del Norte, con un descenso del 0,2 % en Escocia, lo que colocó el precio medio de la vivienda en esa zona en 193.000 libras (250.000 euros). El alto coste de la propiedad, debido a la especulación inmobiliaria, así como de los alquileres, ha generado una crisis de la vivienda en Londres, donde los salarios aún no se han recuperado tras la recesión de 2008.
 
El Gobierno conservador británico, contrario a relanzar el sistema de vivienda social, como defiende la oposición laborista, ha introducido avales para los compradores de primera vivienda, bajo el control del Banco de Inglaterra, que vigila para prevenir un sobrecalentamiento del mercado.