El precio de la vivienda terminada (nueva y usada) aumentó un 0,3 % en julio en relación al mismo mes del año pasado, con lo que sigue la senda de estabilización iniciada hace dos años, según el índice Tinsa IMIE. Entre enero y julio de este año el precio de la vivienda ha subido un 1,6 %, frente al recorte del 0,5 % que experimentó en los siete primeros meses de 2015 y algo inferior al 2,2 % registrado entre enero y junio de este año. El índice acumula un descenso del 41,3 % desde los máximos alcanzados en 2007.

Los mayores incrementos interanuales registrados en julio en el precio de la vivienda se dieron en las capitales y grandes ciudades, con un aumento del 1 % respecto a julio de 2015, y en Baleares y Canarias (+1,7 %). En la costa mediterránea y en las áreas metropolitanas los precios subieron un 0,3% en ambos casos. Por el contrario, el resto de municipios, es decir, las localidades más pequeñas mostraron una caída en el precio de la vivienda del 1,4% interanual.

En el acumulado del año (enero-julio), las islas son las que registran el mayor repunte, con un avance del 4,9 %, seguidas de las capitales y grandes ciudades y el resto de municipios, con un alza del 1,5 % en ambos casos. En la costa mediterránea y las áreas metropolitanas los precios avanzaron un 1,1 % y un 0,2 %, respectivamente, en los siete primeros meses del año. El ajuste medio en España desde el máximo alcanzado en 2007 se sitúa en el 41,3 %. Por debajo de la media se encuentran Baleares y Canarias (-29,2 %) y el resto de municipios (-37,3 %). La costa mediterránea sitúa la caída acumulada del precio de la vivienda en el 47,5 %, seguida de las áreas metropolitanas (-44,9 %) y las capitales y grandes ciudades (-44,5 %).